jueves, 24 de abril de 2008

TIBET LIBRE!


Hablamos mucho de la paz, pero ésta sólo podrá existir con el ambiente propicio. Nosotros debemos crear esa atmósfera y para hacerlo debemos adoptar la actitud correcta.

La Paz, basicamente, debe nacer en nosotros mismos.

Si realemente sintiéramos comprensión y respeto por los Seres Humanos, si nos olvidásemos de la ira y el odio, del temor y el recelo...nacería en nosotros esa paz interior. La gente habla del desarme mundial, pero realmente creo que para llegar a eso un cierto desarme interno es prioritario.

Por qué dejarnos llevar por enojos, así sólo desperdiciamos la mejor parte del cerebro: la sabiduría, la capacidad de saber lo que está bien y lo que no.

Todos deberíamos reflexionar sobre nuestra actitud hacia el mundo, porque cualquier acción nuestra repercute en él...nosotros somos el mundo, todo lo que hagamos al mundo nos lo hacemos a nosotros mismos.