Hay momentos en la vida en los que todo va a un ritmo de locos, en los que corres más que vives...sin embargo en la montaña el tiempo parece ralentizarse. La montaña te regala valiosos momentos, simples espacios de tiempo cargados de simbolismos...instantes fugaces de una vida que espero saber disfrutar siempre...observar desde una reunión el mundo desde arriba (donde TODO se ve diferente), allí no importan los problemas de abajo, allí todos somos iguales, allí se da valor a lo que realmente importa y nada más, allí eres pájaro....pero tengo que vivir abajo...ojalá que estos bocados de vida me enseñen a disfrutar de la vida en cada momento, a vivir más despacio y poder así apreciar cada minuto...sentir que VIVO.
El Txindoki es una montaña de gran belleza, sus 1346 metros de altitud y su porte sumamente elegante (conocido como el "Cervino vasco") hacen de él un monte clásico en Euskadi. Ambos lo habíamos ascendido ya por la ruta normal o desde Aralar, sin embargo el acceder a la cima por la arista oeste le da ese toque de actividad alpina que tanto nos gusta.
Desde el alto de Larraitz (400 m) comienza una pista que da acceso a la ruta normal de ascensión, se sigue por ella hasta que el camino gira a la izquierda y se comienza a ver esta arista, en ese momento se abandona la pista y campo a través se sube hasta el inicio de la propia cresta (1.15 h). Tras llegar al collado se hace una pequeña trepada (I/II grado) para llegar al inicio de la escalada, allí...a esperar!! esta vía suele estar bastante concurrida.
La dificultad de la arista está catalogada como AD o IV grado, posee una longitud de 350 metros y están equipados tanto los pasos claves como las reuniones. Se recomienda llevar algunos friends o fisureros aunque nosotros no utilizamos nada. En cuanto a llevar pies de gato o no, depende de cada uno, en nuestro caso hicimos toda la arista con botas sin ningún problema.
Largo I: diedro de IV grado, en diez metros llegamos a la reunión siguiente (tras pasar este resalte). En la foto se ve el diedro del primer largo, algo lavado por el paso de la gente pero disfrutón...
Largo II: comienza con una travesía de II grado hasta llegar a una brecha en la que se montará la reunión. Desde allí ya podemos apreciar unas vistas preciosas de la comarca...una reunión que te incita a pensar, a disfrutar...
Largo III: un largo muy interesante; primero se supera una chimenea de IV grado colgada al vacío en la parte derecha de la pared (paso un tanto aéreo pero precioso), para luego seguir por una travesía de III grado fácil que conduce a una reunión de parabolts instalada justo a los pies de una placa.
Largo IV: comienza con una placa bastante lisa (IV-) protegida con un parabolt que se supera facilmente por su izquierda al filo de la cresta. Una travesía nos conducirá a la siguiente reunión.
Largo V: tras superar una pequeña chimenea de III+ con buenos agarres de mano se llegará a una travesía fácil de II-III grado (sin ningún seguro) que finaliza a los pies del último resalte importante de la vía.
Largo VI: es el más difícil de la vía (IV+). Se debe superar un diedro y salir de él por la izquierda en un paso un poco acrobático (muy bien protegido con 2 parabolts). Al salir del diedro deberemos realizar un flanqueo aéreo por una repisa entre la hierba (1 clavo) y subir por escalones de hierba y roca (II grado) hasta la última reunión (2 argollas).
Resto Arista: I-II Depende de nuestro nivel se puede progresar en ensamble o bien con la cuerda en la mochila hasta la cima. El trozo de arista que queda es bastante largo pero se sube sin ningún problema.
Tras 2 horas de cresta llegaremos a la cima donde encontraremos unas vistas impresionantes y...un montón de gente a tu alrededor.
El descenso se hace por la ruta normal de ascensión. Se coge una senda que rodea la parte norte de la cresta cimera del Txindoki por su izquierda y que va bajando poco a poco, así hasta llegar al collado de Egural (1160 m). Desde el collado el camino gira en dirección oeste hacia las bordas de Beltzulegi, tras ellas se va bajando por un sendero en zig zags hasta los pies de la pared sur del Txindoki, último vistazo de la arista y muchos buenos recuerdos.
El sendero de descenso no tiene pérdida, tras 1 h? llegaremos a Larraitz. Quitarnos todo el material de escalada, beber un poco...y una escalada más conseguida!!!